A todo riesgo IV: convivir con los desastres geológicos cotidianos

Los desastres también atraen turistas

La Semana de la Ciencia ha incluido un paseo por escenarios de catástrofes geológicas.
G. H. – Segovia

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Un paseo por Segovia. Andrés Díez explicando la geología del entorno del Acueducto de Segovia. /FOTO: KAMARERO

Por extraño que pueda parecer, los lugares donde se han producido desastres naturales suscitan curiosidad. Solo así se explica que las autoridades hayan debido habilitar como aparcamiento un arcén de la carretera que pasa junto al camping de Biescas, en el que fallecieron 87 personas en 1996 a causa de una riada. Existe, pues, un turismo que podría denominarse “de catástrofes”.
El geólogo Andrés Díez, del Instituto Geológico y Minero de España (IGME), cree que el interés existente por visitar los escenarios donde ha habido desastres no es solo por morbo, sino también por conocer los trabajos que realizan los científicos para evitar, en la medida de lo posible, la repetición de dichas catástrofes. Con esas explicaciones justifica Díez el éxito de una excursión científico-didáctica, titulada “A todo riesgo: Convivir con los desastres geológicos cotidianos”, que ayer se celebró por cuarto año consecutivo en Segovia, incluida en la Semana de la Ciencia, y cuyo cupo de plazas quedó completo.
A lo largo de toda la jornada, cerca de medio centenar de participantes —en su mayoría, procedentes de Madrid, aunque también había un grupo de internos en el centro penitenciario de Perogordo y otro de alumnos del instituto “Vega del Pirón”, en Carbonero el Mayor— pudieron conocer, gracias a las explicaciones de expertos, algunos de los desastres geológicos acaecidos en Segovia, una ciudad “privilegiada” en este aspecto, ya que la diversidad de rocas existente, los valles de los ríos y la permanente presencia humana han dejar múltiples huellas de esas catástrofes naturales, algunas muy conocidas —como el desprendimiento de rocas sobre la Casa Rectoral aneja al santuario de La Fuencisla— y otras casi ignoradas, cual es el caso de múltiples deslizamientos, hundimientos o inundaciones en el río Eresma.

Las declaraciones de los participantes en la actividad.-
Hernando Arboleda: «Me ha llamado la atención la cantidad de riesgos que existen sin que la población se de cuenta de ellos»
Víctor de Santos: «La excursión ha sido interesante; he visto cosas que han ocurrido en Segovia y que nunca me había parado a pensarlas»
Mónica Pascual: «Sabíamos ya algo de riesgos naturales por la asignatura ‘Ciencias de la Tierra’ que estudiamos en Carbonero»